miércoles, 7 de enero de 2009

Mis no-reyes


Os juro que hice todo lo que toca. Me fui a dormir a Villa Wendolin por si no se sabían el camino de mi piso. Dejé los zapatos en la terraza. Puse agua para los camellos, un montón de comida que saqué de la despensa. Les dejé unos puros de mi padre para que los fumaran bien contentos. Por si tenían frío, puse un bidón enorme con cosas dentro para quemar, así rollo Bronx. No salí de fiesta y me metí en la cama.
Al despertarme, subí a la terraza para ver si estaban los regalos. Nada, ni los regalos ni todo lo que yo les había dejado a ellos. Busqué en el salón. Tampoco. Salí al jardín. Ni rastro. Y cuando llego a la cocina me encuentro a mi padre en pijama y de nuevo en actitud más que cariñosa con la señora Valdelaspuertas.
Ella me dijo que anoche subió a fumarse un cigarro a la terraza, que pensó que todo mi dispositivo eran trastos que había dejado olvidados, que los recogió y los puso en su sitio.
Y ahora resultará que por culpa de esa arpía no solo me quedaré sin herencia, sino también sin Reyes Magos.



Grrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!!!

4 comentarios:

Yolandera dijo...

a la hogueraaaa , la valdepuertas a la hogueraaaaaaaa

Cohen dijo...

Los reyes magos solo te traen cosas
cuando puedes comprarte unos zapatos de 1000€, pero siendo una clicka burguesa no tendria que haber ningun problema :)

Cohen dijo...

yo creo que te odia por rubia!

La Clicka dijo...

valdelaspuertas es lo peorrrr

y sí, seguro que me odia por rubia!! ya sé que debería poder comprarme esas cosas, pero en realidad la pasta se la he de sisar a mi señor padre. Un rollo, vaya!